Cómo minimizar las distracciones cuando trabajas desde casa

El primer paso: acepta tu distracción

Por Joe Stanganelli

Ilustración de Samar Haddad / The Verge | Fotografía de Robert Nickelsberg / Getty Images

Parte deLa guía de The Verge para trabajar desde casa

Llevo casi 15 años trabajando desde casa. Yo también tengo TDAH. Y muchas suscripciones de transmisión. Y una PlayStation. Y cientos de libros. Y un socio que también a veces trabaja desde casa y es igualmente consciente de la presencia de dichas suscripciones de transmisión, PlayStation y libros.

El caso es que mi casa está llena de distracciones. El tuyo probablemente también lo sea. Tal vez distracciones diferentes a las mías, pero distracciones, al fin y al cabo. Y, como a muchos trabajadores, puede que le haya llevado una pandemia descubrir que puede ser difícil evitar estas distracciones cuando trabaja desde casa. (El trabajo en sí mismo ya proporciona muchas distracciones, si no tiene cuidado: los pings continuos de correos electrónicos y Slacks pueden hacerle sentir que está trabajando todo el tiempo pero que en realidad nunca termina nada).

Claro, hay aplicaciones de productividad y gestión de proyectos. Pero Todoist no lo ayudará a resistir el canto de sirena de TikTok, y Trello no jugará a atrapar al perro. En cierto punto, solo puedes manejar tus distracciones manejándote a ti mismo.

ACEPTA TU DISTRACCIÓN

El primer paso para mitigar las distracciones cuando se trabaja desde casa es aceptar que te distraes porque los humanos somos distraídos. Es parte de tu naturaleza. Y eso está bien.

Tomemos, por ejemplo, a alguien que sigue durmiendo demasiado porque pulsó el botón de repetición de la alarma nueve veces antes de finalmente levantarse. Los que se quedan dormidos saben que una forma de superar esto es mantener el despertador a varios pies de la cama, lo que requiere que el aspirante a dormir se levante de la cama y camine por la habitación para presionar el botón de repetición cada vez que suene la alarma. En cierto punto, se vuelve más tranquilo permanecer despierto.

Puedes hacer lo mismo con las distracciones, preparándote para distraerte de tus distracciones cuando inevitablemente sucumbas a ellas (si no de antemano).

PREPÁRATE PARA DISTRAERTE DE TUS DISTRACCIONES CUANDO INEVITABLEMENTE SUCUMBAS A ELLAS.

Digamos que tu debilidad es la televisión, y sabes que si decides “tomar un breve descanso” frente al televisor, es probable que aún estés en el sofá tres horas después.

Si no puede resistir el canto de sirena de su Vizio, prepárese para, si no es un éxito, un fracaso mínimo. No se arriesgue a dejarse atrapar por un drama de una hora de duración digno de un atracón con ocho episodios para el final, y si lo hace, no espere para retirarse hasta el final de un episodio, cuando probablemente esté más desesperado. para ver qué pasa después. En su lugar, ponte algo simple que entre y salga rápidamente de una historia. Una caricatura infantil que se divide en entregas de seis minutos. Una serie documental que en tan solo cinco minutos explica cómo se fabrican los guantes de béisbol antes de pasar a los electrodos médicos. Un programa de entrevistas diurno que resuelve cuestiones sobre la paternidad de un niño o la fidelidad de un amante entre comerciales de abogados especializados en mesotelioma. Algo que rápidamente lo dejará listo para pasar a algo nuevo.

O digamos que su debilidad es una aplicación de teléfono en particular. Podrías beneficiarte de algún tipo de barrera para dejarte absorber. Mi editor, Nathan, me dice que ha tenido éxito al cerrar sesión o directamente eliminar aplicaciones adictivas si tiene una fecha límite. Personalmente, a veces me gusta dejar mi teléfono en la habitación de al lado. (Después de todo, el teléfono está ahí para mi comodidad, no para la de otras personas.

ESTABLECER LÍMITES DIARIOS

Pero digamos que no quiere ir tan lejos, ya sea porque tiene el tipo de trabajo que requiere que tenga o use su teléfono con frecuencia o porque tiene un caso grave de nomofobia. Puede establecer límites de tiempo diarios para aplicaciones individuales en Android e iOS.

EN ANDROID.

Bienestar digital & pagina de Android de controles parentales

Toque el gráfico para configurar sus temporizadores

Configurar la página del temporizador de la aplicación. Elija su aplicación y configure su temporizador.

  • Vaya a Configuración > Bienestar digital y controles parentales
  • Toca el gráfico
  • Toque Establecer temporizador junto a la aplicación que desea limitar
  • Seleccione el límite de tiempo que desea establecer, luego toque Establecer

EN IOS

Página de tiempo de pantalla iOS

Screen Time le permite establecer límites.

  • Elija la visualización de aplicaciones para el tiempo de pantalla
  • Elija qué aplicaciones desea limitar.
  • Vaya a Configuración> Tiempo de pantalla
  • Asegúrese de que Screen Time esté activado
  • Ir a Límites de la aplicación
  • Presiona Agregar límite
  • Seleccione categorías de aplicaciones o aplicaciones individuales que desea limitar
  • Presiona Siguiente
  • Seleccione el límite de tiempo que desea establecer (Opcional: puede tocar Personalizar días para establecer límites de tiempo para días específicos)
  • Presiona Agregar

(Ah, y no olvides deshabilitar las notificaciones automáticas ).

Si vives con alguien lo suficientemente amable y comprensivo (y especialmente si también trabaja desde casa), prueba el sistema de amigos. Conoce los malos hábitos de los demás. Luego, si uno de ustedes atrapa al otro “atrapado” en alguna distracción, llame suavemente la atención del otro en un intento por sacarlo de allí. Un simple “Hola. Estas atorado. Despegarse” puede hacer maravillas si ambos están comprometidos a hacerlo mejor.

Para ser claros, el objetivo no es evitar la falta de trabajo a toda costa. El objetivo es gestionar las distracciones. A veces, eso significa inclinarse.

PROGRAMA TODO

Mientras me recuperaba de un accidente automovilístico hace años, mi terapeuta ocupacional me dijo que no solo tomara descansos frecuentes mientras trabajaba desde casa, sino que también programara esos descansos en mi calendario, y que los cumpliera tan religiosamente como si fueran una llamada de trabajo o una fecha límite. Lo mismo ocurre con las tareas domésticas, las caminatas al aire libre y casi cualquier otra cosa que no sea “trabajo”. Incluso comer tenía que ir en el calendario.

Sonreí y asentí e ignoré este consejo. Continué luchando.

SONREÍ Y ASENTÍ E IGNORÉ ESTE CONSEJO. SEGUÍ LUCHANDO

Finalmente, me di por vencido: programé cosas como lavar la ropa, refrigerios y hacer ejercicio de tal manera que nunca trabajara durante más de 55 minutos ininterrumpidos (y generalmente menos). Un día típico en mi calendario tendría bloques de trabajo de 30 a 55 minutos interrumpidos por pausas para tareas, pausas para comer, pausas para hacer ejercicio, pausas para descansar y recados. Cada minuto durante mi jornada laboral programada fue contabilizado.

Y efectivamente, mi condición física mejoró gradualmente. (Por cierto, ahora estoy mejor). Pero hubo un efecto secundario curioso: era mucho más productivo. Programar mis distracciones y otras cosas que no son del trabajo en mi día, obligándome a participar en ellas con tanta fuerza como lo haría con cualquier tarea de “trabajo”, me hizo más eficiente y centrado en mi trabajo. Y cumplir con un horario estricto para cosas mundanas como “ver televisión” y “lavar la ropa” me ayudó a controlar mis síntomas de TDAH, sin que se sintiera agotador.

(También lavé más ropa).

Resulta que esto se asemeja a la Técnica Pomodoro, un método de gestión del tiempo desarrollado en la década de 1980, mediante el cual trabajas en intervalos de 25 minutos puntuados por breves descansos. Y mi rutina se parece aún más a la regla 52/17 , una variación de Pomodoro propuesta por Draugiem Group, creadores de la aplicación de productividad DeskTime . En 2014, la empresa informó que los usuarios más productivos de DeskTime trabajaban durante 52 minutos seguidos, luego descansaban durante 17 minutos y así sucesivamente. Sus descansos se volvieron más “efectivos” porque estarían 100 por ciento dedicados a tomar un descanso durante esos 17 minutos asignados y, por extensión, más dedicados durante sus 52 minutos de trabajo.

La conclusión aquí es que los descansos deben ocurrir, así que anótelos en su calendario. En la medida de lo posible, programe todo durante su jornada de trabajo desde casa. Todo. Desde esa llamada telefónica que debe hacer al consultorio de su médico hasta el tiempo que le gustaría pasar jugando Fortnite. (Y, por supuesto, su trabajo real).

Lo mismo para satisfacer las necesidades de sus convivientes. Compañeros de cuarto, pareja, familia, mascotas: cualquier persona con la que viva querrá algo de usted de vez en cuando. Necesitarás ser muy bueno diciendo que no si quieres minimizar las distracciones (aprender a decir que no va más allá del alcance de este artículo), pero hay cosas a las que tendrás que decir que sí. En algún momento, será necesario recoger a los niños, será necesario sacar la basura, se tendrá que hacer / ordenar la cena, etc. Programe todo lo que pueda con anticipación. Y si ambos trabajan desde casa, las responsabilidades del equipo de etiquetas (p. ej., “Me encargaré de los niños pequeños durante las horas pares, tú te encargarás de los niños pequeños durante las horas impares”).

Además, no se olvide de la programación negativa. A veces, las distracciones son incluso menos bienvenidas de lo habitual (como cuando estás en una videollamada, trabajando en un problema complicado o apurándote para terminar un proyecto). Tal como lo haría (o, al menos, debería hacer) con sus compañeros de trabajo remotos, sea comunicativo. Hágales saber a las personas con las que vive que mañana de 1:30 p. m. a 2:30 p. m. está prohibido. O que, si tu puerta está completamente cerrada, no toques.

El corolario de todo esto es que, para evitar distracciones mientras trabajas desde casa, también debes evitar las distracciones laborales mientras vives desde casa. A menos que realmente tenga el tipo de trabajo en el que debe estar disponible las 24 horas del día, los 7 días de la semana, asegúrese de que cuando esté libre, esté libre, ya sea para la hora de la cena, la hora de acostarse, el tiempo en familia o el tiempo a solas. No puedes aprovechar al máximo tu trabajo si estás haciendo lo mínimo de tu vida.

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