Uno de ellos es HOPE, un proyecto para la detección del cáncer de cuello uterino. Patricia García, ex ministra de Salud lidera esta iniciativa.
Los ganadores recibirán asesoramiento por parte de Fundación MAPFRE e IE University para desarrollar sus propuestas de forma más efectiva.
Transformación social e impacto global. Son los principales atributos por los que han destacado los nueve proyectos de innovación social que clasificaron a las semifinales de los Premios a la Innovación Social de Fundación MAPFRE, entre los cuales se encuentran dos iniciativas peruanas.
Hope es el proyecto de la ex ministra de salud Patricia García, que consiste en un kit de análisis de muestras de ADN con auto-toma, sencillo y de bajo coste, que detecta las cepas de alto riesgo del VPH y permite prevenir el cáncer de cuello uterino en mujeres. En la categoría de salud y tecnología digital, el plan de nuestra compatriota ha pasado a la última fase del concurso.
Este evento se realiza exitosamente desde hace tres años y tiene como objetivo mejorar la salud, la movilidad sostenible y la innovación aseguradora. Los proyectos finalistas, que acompañan a Hope proceden esta vez de Brasil, Ecuador y España. Todos buscan dar respuesta a grandes desafíos, como, mejorar la calidad de vida de las personas, reducir la contaminación de las ciudades, apoyar a las personas mayores, entre otros, y hacer frente a las necesidades generadas durante la crisis actual.
Patricia García compite directamente con el Instituto Laura Fresatto (Brasil), que ha desarrollado una plataforma de inteligencia artificial que envía señales tempranas a los profesionales de la salud de pacientes con riesgo de deterioro clínico, contribuyendo así a reducir la mortalidad y la estancia hospitalaria. Y i4life (España), un dispositivo inteligente que se acopla a un bastón y que es capaz de emitir estímulos visuales y táctiles para ayudar a que las personas con Párkinson y Alzhéimer ganen confianza e independencia.
En la categoría de innovación aseguradora, se encuentra el proyecto peruano Saving the planet you have innovative health insurance, que proporciona a personas vulnerables y afectadas por tuberculosis la posibilidad de realizar actividades de reciclaje de residuos sólidos y obtener, con los fondos recaudados, un seguro de salud. Aquí también ha destacado Electroware de Brasil, una plataforma de bajo coste y fácil instalación que proporciona información sobre la calidad de la energía y contribuye a reducir el riesgo de daños eléctricos; y Pensium (España), una solución que facilita que las personas mayores dependientes puedan financiar sus cuidados asistenciales, en residencia privada o en su domicilio, sin necesidad de vender su casa.
Jurado de expertos
Un grupo de expertos elegidos por Fundación MAPFRE e IE University, socio académico de estos premios, han elegido los proyectos con mayor potencial de impacto social, así como los más viables desde el punto de vista técnico, económico y organizativo, y los que mejor se han adaptado a esta nueva situación.
Red de innovadores
Los proyectos participantes forman ya parte de Red Innova, una comunidad emprendedora con más de 60 startups -incluidos los ganadores de pasadas ediciones, que comparten proyectos y experiencias, y que ha sido especialmente activa durante el confinamiento. En este sentido, muchos de los emprendedores sociales han adaptado sus servicios a las necesidades generadas por la pandemia, como por ejemplo a través de la producción de material sanitario con impresoras 3D, ofreciendo servicios gratuitos de atención psicológica, atendiendo a agricultores por vía telemática, y aportando rehabilitación o monitorización remota online, entre otros.
Mentoring y visibilidad ante inversores
Los nueve finalistas recibirán apoyo, orientación y ayuda para comunicar y desarrollar de la forma más efectiva sus propuestas a través de coaching y accederán a un plan de relaciones públicas para potenciar la visibilidad de sus proyectos ante potenciales inversores y financiadores.
Final: Madrid, 29 de octubre
Fundación MAPFRE espera poder celebrar una gran final como en las ediciones anteriores, lo que dependerá de las medidas de seguridad vigentes en ese momento. La ceremonia se adaptará a los protocolos recomendados por las autoridades y a las realidades de los países que participan en el certamen.