Un alto mando de la Fuerza Espacial alertó que China está cerrando la brecha de “superioridad espacial” luego de detectar prácticas de combate entre satélites chinos en la orbita terrestre baja.
China
Imagen ilustrativa. Concepto de un combate espacial entre satélites.3DSculptor/Getty Images
Un alto mando de la Fuerza Espacial de los Estados Unidos (USSF, por sus siglas en inglés) alertó que China y Rusia están cerrando la brecha con Estados Unidos en materia de seguridad espacial, y puso como ejemplo la detección reciente de un ejercicio militar con satélites chinos de baja órbita.
La USSF está «comenzando a ver a nuestros pares concentrándose en prácticas de dogfighting en el espacio [en operaciones] de satélite-a-satélite», dijo el general Michael Guetlein, subdirector de Operaciones Espaciales. En un contexto tradicional de aviación militar, una dogfight es un combate aéreo cercano entre aviones de caza.
“Con nuestros activos comerciales, hemos observado cinco objetos diferentes en el espacio maniobrando entre sí, entrando, saliendo y rodeándose de forma sincronizada y bajo control. Esto es lo que llamamos dogfighting en el espacio. Están practicando tácticas, técnicas y procedimientos para realizar operaciones espaciales en órbita de un satélite a otro”, añadió el militar.
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La Fuerza Espacial confirmó al medio Defense One que Guetlein se refería a una serie de maniobras satelitales detectada en 2024 en la órbita terrestre baja. Estos ejercicios fueron ejecutados por tres satélites experimentales Shiyan-24C y dos objetos espaciales experimentales Shijian-6 05 A/B. Se cree que el sistema Shijian-6 tiene capacidad de «inteligencia electrónica», es decir, que puede intervenir comunicaciones desde el espacio.
El general Guetlein hizo estas declaraciones en el marco de la conferencia anual McAleese de Programas de Defensa, un evento realizado esta semana en Arlington, Virginia. El militar denunció a los adversarios de Estados Unidos de «ir en contra de las normas internacionales de comportamiento, de ir en contra de ese acuerdo entre caballeros, y están dispuestos a hacerlo de manera muy insegura y poco profesional”.
La carrera por el dominio espacial
Estados Unidos tiene motivo para estar nervioso. Este mes se divulgó la existencia de dos satélites chinos con capacidades avanzadas de monitoreo basadas en tecnología láser y de radiación de microondas. El primero es un sistema que equipa una cámara capaz de ver rostros humanos en superresolución desde la órbita terrestre baja. El segundo es el primer satélite de radar en órbita alta, brindando una visión de lo que ocurre en la región Asia-Pacífico.
Este es solo un ejemplo de los últimos saltos que están dando Rusia y China (sobre todo este último) en la carrera armamentista espacial, un llamado de atención que Guetlein quiere que sus superiores comprendan con la mayor de las atenciones. «Esa brecha de capacidad solía ser enorme», advirtió el militar. «Se ha reducido significativamente, y tenemos que cambiar nuestra perspectiva sobre el espacio, o podría revertirse y dejar de ser favorable para nosotros».

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Esta es la primera vez que se realiza un envío de claves cuánticas desde la órbita baja en el hemisferio sur.
Dio otro ejemplo, este de un caso registrado en enero de 2022. «Estamos viendo brazos de agarre en el espacio capaces de remolcar otro satélite o mantenerlo como rehén», dijo Guetlein, en referencia a la detección de un satélite chino que tuvo la capacidad de jalar a un satélite inactivo (también de origen chino) hacia una órbita cementerio.
Para volver a ampliar la ventaja sobre sus adversarios y consolidar la “superioridad espacial” de Estados Unidos, Guetlein no solo pidió un mayor presupuesto para la USSF («Solo seremos tan buenos como la cantidad de recursos que estemos dispuestos a destinar a la superioridad espacial»), también exigió un replanteamiento de la estrategia para brindar una mejor defensa a los satélites estadounidenses.
“Ya no controlamos la tecnología. La tienen las empresas comerciales, al igual que nuestros aliados. Todos juntos somos mejores que la suma de las partes. Las alianzas nos brindan proliferación, exceso de capacidad, redundancia y amplían considerablemente la superficie de ataque para nuestros adversarios”, concluyó.