Juan Antonio Pascual Estapé.
La NASA ya tiene listos los tres mini rover autónomos que van a trabajar juntos en la Luna
NASA
Tres mini rover del tamaño de un coche teledirigido, van a mapear la Luna en 3D.
Serán los primeros vehículos autónomos lunares, y además funcionan en grupo, coordinándose entre sí.
Parecen tres carritos de juguete, y de momento no tienen nombre. Pero son tecnología punta: los primeros vehículos lunares autónomos y colaborativos de la historia. Viajarán a la Luna en cuestión de meses.
El rover Perseverance ha hecho historia en Marte, pero tiene el tamaño de una furgoneta, y necesita ser manejado por control remoto.
La NASA va a experimentar a final de año con una nueva generación de vehículo lunar, completamente revolucionaria: un mini rover no más grande que un coche de juguete, autónomo, y que trabaja en grupo. Ya está terminado.
Así son los nuevos mini rover de la NASA
Estos nuevos vehículos lunares forman parte del programa Exploración Robótica Autónoma Distribuida Cooperativa (CADRE), que la NASA enviará a la Luna en la tercera misión privada de Intuitive Machines, a finales de año o principios del que viene.
La primera misión se perdió y la segunda aterrizó de costado, así que esperemos que a la tercera sea la vencida.
Mini rover autónomos de la NASA
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La NASA lleva meses probando los tres pequeños rover, y las pruebas han sido todo un éxito. Según explican en Space, estos mini vehículos lunares usan la misma tecnología que los coches autónomos. Mediante cámaras y sensores, e inteligencia artificial, pueden moverse por la Luna y esquivar obstáculos. Con la ventaja de que allí no hay tráfico ni peatones…
Recibirán la energía mediante paneles solares. Cada rover tiene la capacidad de comprobar cuánta batería les queda a los otros dos, para detenerse si alguno de ellos se queda sin energía.
Disponen también de un radar de penetración terrestre que permite generar una imagen 3D del suelo. Trabajarán los tres, de forma coordinada, para cubrir más terreno.
Al ser autónomos, la NASA podrá dejarlos en la Luna, decirles qué superficie tienen que mapear, y ellos se encargarán de todo.
Es un cambio revolucionario, frente a los rover actuales que deben ser manejados manualmente.
Estos mini rover ya han superado las pruebas de estabilización, sacudidas, temperatura y presión extremas, e interferencias. En definitiva, están listos para partir a la Luna.
Si todo va bien, a finales de año o principios del siguiente, los primeros rover autónomos se moverán a su antojo por la Luna, mapeando el terreno en 3D.