El telescopio espacial Hubble – Sputnik Mundo, 1920, 22.06.2021
© Foto: NASA/Smithsonian Institution/Lockheed Corporation
Desde 1990, cuando la NASA lanzó Hubble al espacio, hemos logrado una comprensión más amplia del universo. El mítico telescopio puede ver planetas, estrellas y galaxias que están hasta 13.400 millones de años luz de distancia. Pero tras tantos años funcionando, el Hubble tiene fallas. Algunas podrían deberse a una computadora desarrollada en 1980.
Hasta que el nuevo telescopio espacial James Webb sea lanzado el 31 de octubre de 2021, el viejo y querido Hubble aún debe sobrevivir y recibir las reparaciones necesarias. Desde el 13 de junio el está inactivo, o en palabras de la NASA, en «modo seguro»: dejó de realizar todas sus operaciones científicas.
Los técnicos de la agencia espacial están abocados a restaurar su computadora de carga útil, un sistema NASA Standard Spacecraft Computer-1 (NSSC-1) construido en la década de 1980 que se encuentra en la unidad de mando y manejo de datos del telescopio más importante en la historia de la humanidad.
Según explican en un comunicado, el equipo realiza pruebas y recoge información sobre el sistema «para seguir aislando el problema», porque aún no sabe exactamente cómo solucionarlo. La NASA dijo a Forbes que evalúa «múltiples opciones» y que está trabajando para encontrar la «mejor solución» para devolver el telescopio a sus funciones lo antes posible.
¿Por qué se rompió el Hubble?
Los primeros indicios apuntaban a que se había roto un módulo de memoria de la computadora. Sin embargo, la NASA detalló que cuando cambiaron a un módulo de memoria de reserva y reiniciaron el sistema del Hubble, el problema persistió.
En un segundo abordaje, intentaron acceder a ambos módulos para obtener más información de diagnóstico. Mientras, probaron poner en línea ambos módulos de memoria. Esos intentos tampoco tuvieron éxito.
El objetivo del NSSC-1 es controlar y coordinar los instrumentos científicos y supervisarlos con fines de salud y seguridad, explica la NASA. «Es totalmente redundante en el sentido de que existe un segundo ordenador, junto con su hardware asociado, en órbita al que se puede recurrir en caso de problema», asegura.
Ambas computadoras pueden acceder y utilizar cualquiera de los cuatro módulos independientes —cada uno contiene 64K de memoria de semiconductor complementario de óxido metálico (CMOS)—. Pese a que el ordenador de la carga útil solo utiliza un módulo de memoria a la vez, y los otros tres sirven de reserva, los científicos no han logrado activarlos.