Un astrónomo de Harvard afirma que los extraterrestres podrían haber llegado a la Tierra en 2017.

Raúl Barrón.

Un astrónomo de Harvard afirma que los extraterrestres podrían haber llegado a la Tierra en 2017

Un astrónomo de Harvard y habitual colaborador de la Casa Blanca asegura que los extraterrestres ya han visitado la Tierra. Probablemente, fue 2017 cuando se pudo confundir su nave con un cometa.

El debate sobre la vida extraterrestre ha vuelto con más fuerza que nunca tras las declaraciones recientes de aquel exoficial del pentágono que aseguraba que Estados Unidos conoce y lleva estudiando mucho tiempo, no solo OVNIs, sino los restos de sus tripulantes.

En este contexto, una voz respetada ha añadido más incertidumbre al asunto. Abraham Loeb, astrónomo destacado de la Universidad de Harvard y conocido por su colaboración con la Casa Blanca, ha dado un paso al frente y afirmado con convicción que los OVNIs han visitado la Tierra.

Loeb, también conocido como Avi, ha argumentado en diversas ocasiones sobre la existencia de civilizaciones extraterrestres. Su teoría más destacada gira en torno a “Oumuamua”, un cuerpo interestelar “del tamaño de un campo de fútbol” que cruzó el sistema solar en 2017.  “Creer que estamos solos es un acto de egocentrismo cósmico”, afirma el astrónomo.

Loeb planteó la posibilidad de que este extraño objeto fuese en realidad una nave alienígena a la deriva en lugar de un simple cometa, lo que le valió cierta polémica y atención mediática. En una entrevista con la revista XL Semanal, Loeb detalló su teoría y cómo este objeto podría ser un indicio de la presencia de extraterrestres en nuestro entorno.

Ha estudiado dos objetos que llegaron a la Tierra en 2014

Además, Loeb compartió que ya ha identificado otros dos objetos interestelares que llegaron al sistema solar antes de “Oumuamua”, incluyendo el meteorito que impactó en la Tierra en 2014. El científico considera que podrían ser fragmentos de naves.

La colaboración de Loeb con la Fuerza Espacial estadounidense ha impulsado sus investigaciones, que incluyen la instalación de telescopios en el observatorio de Harvard para el estudio del espacio y la atmósfera terrestres.

A pesar del escepticismo que le confronta, Loeb se mantiene firme en su búsqueda de respuestas y su dedicación a la ciencia. Sus investigaciones desafían las normas y nos recuerdan que, en la vastedad del universo, la exploración del espacio y el descubrimiento continúan siendo desafíos apasionantes y llenos de posibilidades.

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