La herramienta llamada Voice Engine fue entrenada con 15 segundos de la voz de la joven.
Joven ‘recupera’ su voz gracias a la IA tras perderla por un tumor cerebral
Alexis Bogan usa un teléfono móvil con una herramienta de clonación de voz para pedir una bebida en un autoservicio de Starbucks, en EE.UU., el 29 de abril de 2024.
Steven Senne / AP
Alexis ‘Lexi’ Bogan, una joven estadounidense de 21 años, recuperó su antigua voz mediante un clon sintético creado por OpenAI, que puede reproducir su voz original a voluntad desde una aplicación de teléfono móvil, informó este lunes AP.
En agosto del pasado año, los médicos le extirparon un tumor cerebral mortal que le dejó como secuela afectaciones en el habla. El clon se logró tras entrenar al sistema de inteligencia artificial (IA) con un registro de 15 segundos de su voz adolescente que había grabado para un proyecto escolar. Así, la joven escribe las palabras que quiere expresar en su teléfono y la aplicación las reproduce instantáneamente en altavoz. «Creo que es fantástico poder volver a tener ese sonido», señaló Bogan.
Sorprendentemente real.
Josh Reynolds / AP
Su voz sintética reproduce un sonido sorprendentemente real y cuando lo probaron por primera vez, todos quedaron atónitos por su calidad. «Me emociono mucho cada vez que escucho su voz», comentó su madre, Pamela Bogan. La tecnología está ayudando a aumentar su autoestima y calidad de vida.
La joven está ansiosa por saber si la tecnología será capaz de hacer que su voz ‘envejezca’ mientras pasan los años. Por ahora, «aunque no recuperé completamente mi voz, tengo algo que me ayuda a encontrarla nuevamente», indicó Bogan.
Un equipo de médicos del grupo hospitalario Lifespan de Rhode Island (EE. UU.) trabajó juntamente con la empresa tecnológica OpenAI, creadora de ChatGPT, para desarrollar la herramienta llamada Voice Engine, que se usó para replicar la voz perdida de Bogan. El sistema aún no está disponible al público.
«Esperamos que Lexi sea pionera a medida que se desarrolla la tecnología», señaló el doctor Rohaid Ali. El especialista considera que millones de personas con accidentes cerebrovasculares debilitantes, cáncer de garganta o enfermedades neurogenerativas podrían beneficiarse de estos avances.