Créditos de las imagenes: Technion Press Room.
Un estudio revela que observar elementos naturales durante las rutinas diarias, como caminar hacia y desde el trabajo mejora el estado de ánimo y alivia el estrés y la ansiedad.
Según los participantes alivia el estrés.
La investigación fue dirigida por la Dra. Whitney Fleming, investigadora postdoctoral en el grupo de investigación del Prof. Assaf Shwartz.
El estudio utilizó tecnología de seguimiento ocular para examinar los beneficios de las interacciones diarias con la naturaleza.
Como parte del estudio, se pidió a los estudiantes de Technion que dieran un paseo por el campus, simulando una caminata normal hacia o desde el trabajo o los estudios.
Los estudiantes se dividieron en tres grupos.
Al primer grupo se le pidió que observara la naturaleza durante la caminata y se detuvieran diez veces en puntos «verdes» con elementos naturales.
Al segundo grupo también se le pidió que se detuviera diez veces, pero en puntos «grises» con elementos artificiales construidos, como edificios, carreteras y automóviles.
El tercer grupo combinó ambos, observando elementos tanto naturales como artificiales.
Los individuos que dirigieron su mirada con mayor frecuencia a los elementos verdes informaron de una disminución del estrés y la ansiedad después de la caminata, en comparación con las mediciones tomadas antes de la caminata.
Esta reducción no se registró en los otros grupos.
Los investigadores rastrearon los movimientos oculares de los participantes y encontraron una correlación entre la duración de la visualización de elementos naturales como árboles, arbustos y césped, y mejoras en los indicadores de salud mental.
El impacto más beneficioso se observó al observar los árboles.
El profesor Shwartz nos dijo:
Al utilizar tecnología de seguimiento ocular de vanguardia, nuestra investigación muestra que, simplemente siendo conscientes de la naturaleza, incluso durante una caminata regular hacia o desde el trabajo o los estudios, puede ser beneficioso para nuestra salud mental y ayudar a aliviar el estrés.
Estudios anteriores han demostrado que la interacción con la naturaleza tiene beneficios para la salud mental y la calidad de vida, pero este estudio demuestra por primera vez que incluso unas pocas miradas fugaces a la naturaleza durante las rutinas diarias pueden producir estos beneficios.
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El profesor Shwartz añadió: «nuestra investigación muestra lo importante que es incorporar elementos naturales en la planificación urbana.
Sin embargo, esta integración no es suficiente, los arquitectos y planificadores paisajistas también deberían pensar en medios innovadores para mejorar la experiencia de esta naturaleza y garantizar que los residentes «realmente notemos estos elementos.
El desafío es diseñar nuestras ciudades de una manera que fomente la interacción entre las personas y la naturaleza.
Dichas interacciones mejorarán tanto la calidad de vida de los residentes como su conexión con la naturaleza y su deseo de preservarla».